Hace algunos días llegó a mis manos, este poema, desde entonces no he podido dejar de meditar
sobre lo que sin necesidad de ser muy inteligente o entender de política, nos está enseñando. Aunque está escrito, en el 1700 y por un religioso franciscano, Demuestra que ya entonces supo ver con claridad el engaño de los políticos, creo que hoy en día, todos podemos ver cuanta realidad supo ver y transmitir este religioso, yo después de leer y releer, este poema, deseo compartirlo con todo aquel que entre en mi blog.
Meditemos y no nos dejemos engañar más por estos políticos, ellos no nos ayudarán a vivir, sino todo lo contrario, yo nunca he hablado de política, ni la entiendo ni la quiero entender, pero es tan evidente la podredumbre que existe en nuestros días que hasta el más neófito puede ver lo mal que nuestros políticos trabajan por los intereses y el bienestar de los Españoles.
Estoy escribiendo esto, porque necesito exponer mis sentimientos, me siento cada día más engañada en todos los sentidos, siento que nuestros políticos nos están relegando, que para ellos somos el ultimo mono, que antes que nosotros los (Españoles) están todos los emigrantes, yo nunca entenderé, como se puede proceder dando a los de fuera lo que niegas a los tuyos.
Creo que lo justo seria, empezar por arreglar tu casa y si sobra emplearlo en los demás, pues creo que cada familia ha de ser responsable de los suyos, y procurar un bienestar común entre todos, pues estoy segura que la vida tiene abundancia para todos, pero que la roban y acumulan solo unos pocos que son egoístas y creen que no se morirán nunca o que se lo llevarán al otro mundo, cosa que si se pararan a pensar, se darían cuenta de lo inútil que resulta amasar viendo sufrir al prójimo, deberíamos meditar profundamente, con el corazón y no con la mente, desde el amor y no desde el egoísmo etc. etc. porque la única verdad que es evidente y que todos sabemos es que todos nacemos desnudos y solos y nos vamos sin nada y solos, por tanto creo que lo que importa en realidad es que mientras transitamos por la vida podamos ser lo más felices posible, cosa que se podría conseguir solo con ser más amorosos, humanos y justos. Espero que os guste y os sirva como me ha servido a mi para darme cuenta, que estamos en una rueda de la que pasan los años o los siglos y nunca cambiará, mientras no cambiemos nosotros.
Hijo mio, por favor, de tu blando lecho salta.
Déjame dormir, mamá, que no hace ninguna falta.
Hijo mio, por favor, levántate y desayuna.
Déjame dormir, mamá, que no hace falta ninguna.
Hijo mio, por favor, que traigo el café con leche.
Mamá, deja que en las sábanas un rato más aproveche.
Hijo mio, por favor, que España entera se afana.
!Que no! !que no me levanto, porque no me da la gana!
Hijo mio, por favor, que el sol está ya en lo alto.
Déjame dormir, mamá, no pasa nada si falto.
Hijo mio, por favor, que es la hora del almuerzo.
déjame, que levantarme, me supone mucho esfuerzo.
Hijo mio, por favor, van a llamarte haragán.
Déjame, mamá, que nunca me ha importado el que dirán.
Hijo mio, por favor, ¿y si tu jefe se enfada?.
Que no, mamá, déjame que no me va ha pasar nada.
Hijo mio, por favor, que ya has dormido en exceso.
Déjame, mamá, que soy diputado del congreso y si falto a las sesiones ni se advierte, ni se nota.
Solamente necesito, acudir cuando se vota.
Que los diputados somos, ovejitas de un rebaño para votar lo que digan y dormir en el escaño.
En serio, mamita mía, yo no sé porque te inquietas.
Si por ser culiparlante, cobro mi sueldo y mis dietas.
Lo único que preciso, de verdad, mamá, no insistas.
Es conseguir otra vez, que me pongan en las listas.
Hacer la pelota al líder, ser sumiso, ser amable y aplaudirle, por supuesto
cuando en la tribuna hable.
Y es que ser parlamentario, fatiga mucho y amuerma.
Por eso estoy tan molido.
!Déjame, mamá, que duerma!
Bueno, te dejo, hijo mio... Perdóname, lo lamento...
!Yo no sabía el estrés, que produce el parlamento!
(Fray Junípero (1713-1784) religioso franciscano Español).
Escrito por: Trini. P.G.